Como joven artista, Sofía demuestra su dedicación a la música y su voluntad de innovar en el escenario; integra técnicas más allá de lo convencional, como "Ritmo con signos", que invita a su público a cantar con ella.

Su carrera musical se remonta a los 13 años, cuando grabó "Bailarina" con su padre, Rodrigo Leão. Su primer álbum, "Mar", está compuesto a partir de un proceso de creación en solitario acompañada de amigos y luego con el apoyo de João Eleutério en el estudio.

"Mar" es descrito por Sofía como un viaje de autodescubrimiento, que le permite "zarpar hacia el mar" y explorar lo que para ella tiene sentido dar a conocer a su público.