"Durante muchos años, se ha buscado una solución para las antiguas instalaciones del parque acuático Aqualine, en Altura, que cerró hace algunas décadas", se lee en un comunicado del municipio del distrito de Faro.

Según la autoridad local, el promotor de los pequeños proyectos "pretendía poner en marcha el Plan de Detalle del Alto da Cruz con el Consejo Municipal de Castro Marim, proponiendo convertir alrededor de 18 hectáreas en una zona turística".

Sin embargo, el Ayuntamiento de Castro Marim entendió que sería "más interesante, menos intrusivo y más vinculado a la estrategia confinada para el territorio, no aumentar la densidad de construcción como implicaría el citado Plan de Detalle".

Así, tras varias reuniones de trabajo, y de acuerdo con el promotor, se aprobaron tres pequeños hoteles rurales, que mantendrán el mismo tipo de uso del suelo en ese espacio y también todo el arbolado.

De esta forma, el proyecto no aportará "más carga urbanística al área territorial costera" del municipio de Castro Marim.

"Las unidades de turismo rural serán dispersas, cada una basada en los equipamientos y preexistencias de todo el entorno, lo que aportará una oferta turística diferenciada y acorde con la baja densidad del territorio".

El antiguo parque acuático se inauguró en julio de 1988 y la última temporada de baño que funcionó fue en 1993.

Ese año, dos niños murieron en el espacio de dos días en Aquaparque, en Lisboa.

Tras las muertes, se modificó la normativa y el funcionamiento de los parques acuáticos, lo que exigió cambios que llevaron al cierre de varios parques.