Se trata de "una medida pionera que refuerza el compromiso del municipio con la protección de los animales y el apoyo social a las familias más necesitadas" y está dirigida a "familias o personas en situación de vulnerabilidad socioeconómica residentes en el municipio de Faro que sean propietarias de perros o gatos", declaró el ayuntamiento.
El apoyo prestado incluye el suministro de alimentos, la identificación electrónica con microchip, el registro en el Sistema de Información de Animales de Compañía (SIAC) y la desparasitación interna, dijo el Ayuntamiento del Algarve.
"Con esta iniciativa, la ciudad pretende reducir el número de animales abandonados, apoyar económicamente a las familias necesitadas y garantizar mejores condiciones de vida para los animales", explicó el municipio.