"IAG confirma que ha presentado una declaración de interés a Parpública en el marco del proceso del Gobierno para la privatización parcial de TAP. Sin embargo, varias cuestiones deben ser aclaradas antes de que IAG pueda proponer una inversión", dijo una fuente oficial del grupo en un comunicado publicado hoy.

El Gobierno tiene previsto vender hasta el 44,9% del capital de la aerolínea, reservando el 5% para los empleados, según estipula la Ley de Privatización. Si este tramo no se suscribe en su totalidad, el futuro comprador tendrá derecho de tanteo.

Considerando que "TAP tendrá un potencial significativo dentro de IAG", el grupo argumenta que su "modelo descentralizado proporciona márgenes líderes en la industria y está en línea con la ambición del Gobierno portugués de proteger TAP".

"Nuestro historial demuestra cómo invertimos para fortalecer nuestras aerolíneas, beneficiando a clientes, empleados, economías locales y accionistas", sostiene.

A partir del 22 de noviembre, Parpública, la empresa que gestiona las participaciones del Estado, tiene un plazo de 20 días (hasta el 12 de diciembre) para entregar al Gobierno un informe en el que se describan las partes interesadas que han manifestado su interés y se evalúe si cumplen los requisitos de participación.

En los 20 días siguientes a la entrega del informe, se invita a los interesados que hayan demostrado el cumplimiento de los requisitos a presentar una propuesta no vinculante.

Esta segunda fase del proceso, que se dividirá en cuatro etapas, estipula que la propuesta debe incluir, entre otras cosas, el precio ofrecido por la adquisición de las acciones e información sobre cómo obtener los recursos financieros necesarios para completar la compra.

Pueden presentarse operadores nacionales o extranjeros, individualmente o en consorcio, siempre que cumplan los criterios definidos, entre ellos unos ingresos superiores a 5.000 millones de euros en al menos uno de los tres últimos años y experiencia demostrada en el sector de la aviación.

Las propuestas también se evaluarán en función del refuerzo de la flota, la inversión en mantenimiento e ingeniería, la apuesta por los combustibles sostenibles, el respeto de los compromisos laborales y la visión sobre un posible refuerzo de la posición accionarial, según el anuncio publicado recientemente.

Tal y como anunció el Gobierno en julio, la privatización de TAP -que también incluye Portugália, la Unidad de Asistencia Sanitaria de TAP, Cateringpor y SPdH (antes Groundforce)- debería tener lugar a lo largo de aproximadamente un año, aunque el calendario definitivo depende de las aprobaciones reglamentarias.

Además de IAG, Air France-KLM y el Grupo Lufthansa también formalizaron esta semana su interés en el proceso de privatización de TAP.