La información fue anunciada por las instituciones en un comunicado, después de que los negociadores de los países y los eurodiputados alcanzaran esta mañana un consenso sobre un proyecto de ley que "aclara la definición de viaje combinado, las condiciones para cancelar un viaje y los derechos de los viajeros a la información, la asistencia y el reembolso en diversas situaciones, entre ellas cuando el operador de viajes quiebra o cuando circunstancias extraordinarias causan perturbaciones en el viaje".

Las nuevas normas deberían facilitar la identificación de las combinaciones de servicios de viaje que constituyen un viaje combinado y, por tanto, están cubiertas por la protección incluida en esta ley.

Al mismo tiempo, la directiva actualizada también incluye disposiciones detalladas sobre el uso de bonos, que se hicieron comunes durante COVID-19, y que no tienen por qué ser aceptados por los consumidores.

Además, si el organizador del viaje quiebra, los clientes deben recibir el reembolso de los servicios cancelados con cargo a los fondos de garantía de insolvencia en un plazo de seis meses o, en casos excepcionales, de nueve meses.

Reclamaciones

También se acordó establecer un mecanismo claro de tramitación de reclamaciones, que garantice que los problemas denunciados se traten con razonable rapidez, en un plazo de siete días para acusar recibo de la reclamación y de 60 días para una respuesta motivada.

Los colegisladores decidieron no armonizar el nivel de las sanciones por infracciones en las nuevas normas y no limitar el nivel de los pagos anticipados, pero los Estados miembros que lo deseen podrán hacerlo por su cuenta.

El acuerdo deberá ahora ser aprobado formalmente por el Parlamento Europeo y el Consejo a principios del próximo año antes de su entrada en vigor. Los países de la UE dispondrán entonces de 28 meses para adaptar su legislación a las nuevas normas y de otros seis meses para empezar a aplicar las nuevas disposiciones.

La revisión se produce después de que, durante la pandemia de COVID-19, muchos viajeros que adquirieron paquetes vacacionales se enfrentaran a problemas inesperados y complejos, como cancelaciones repentinas de vuelos y estancias, cambios en las normas de entrada en distintos países, requisitos obligatorios de pruebas o cuarentena y dificultades para obtener reembolsos de las agencias de viajes.

La constante incertidumbre sobre las medidas sanitarias y la falta de información clara por parte de algunos operadores turísticos perjudicaron a miles de consumidores de la UE. La Directiva de la UE sobre viajes combinados establece normas que garantizan a los viajeros protección, información clara, derecho a reembolso y asistencia al reservar servicios de viajes combinados.