Los hallazgos también indicaban una reaparición posterior hace unos 440.000 años, durante el periodo glaciar de Anglia, mucho antes de que los primeros europeos dominaran el fuego.

Estos hallazgos se publicaron en Nature Ecology and Evolution, poniendo en tela de juicio la cronología de la presencia de los homínidos en Gran Bretaña y las ideas previas sobre la adaptación de los primeros humanos.